Aterrizamos sin problemas y vimos como con mucho amor aporreaban e
l equipaje, así que me alegre de optar por llevar mi cámara en el bolso de mano.
Arrendamos un autito n.n
Almorzamos en la caleta de Angelmó y opté por atreverme a unas "machas a la parmesana", error, y el plato traía muchas, unas 12 por 4500 pesos y no fui capás, no podía olvidarme de zoología y las partes de estos organismos, así que solo pude comerme 3 antes de tirar la esponja, mi mamá alcanzó a comerse 1, todo el resto se lo dimos a mi papá. Luego procedí a comerme su congrio, que estaba muy bueno.
Nos fuimos en la tarde a Chiloé por Canal de Chacao en un transbordador que llevó el auto y a nosotros para llegar al archipiélago. Durante el viaje a través del canal vi un pingüino de Magallanes ( tenía 2 franjas negras) navegando solo por la vida y un lobo de mar.
Llegamos en la tarde (4 p.m.) a Chiloé y empezamos a buscar casa o cabaña por los alrededores, y bueno (yo era la encargada de la plata) así que elegimos una cabaña que cobraba $25.000 que tenía dos dormitorios, agua caliente y lo mejor de todo es que estaba cerca de un bosque y una lagunilla.
Al día siguiente fuimos y tomamos un tour a las Pingüineras en Puñihuil, pedimos servicios de taxis al lugar, ya que no había terreno pavimentado y el auto arrendado no podía por lo tanto pasar por el. Llegamos al lugar y el precio por persona era de $15.000. En primer lugar nos subían a una lanchita y nos llevaban por varias islas, donde habitaban estas aves, pero antes de ver ningún ave, apareció el gato de mar (chungungo) que iva comiendose algo justamente, y posaba con su guatita al cielo, mientras sacabamos fotos. Luego nos encontramos frente a una pingüinera de los magallánicos, en donde además de pingüinos se veían los comoranes guanay y yeco, bandurrias.